El consumo de drogas es un problema grave con efectos tanto para el consumidor como para la sociedad en su conjunto. El primer paso para contrarrestar este fenómeno es concienciar sobre los peligros y las consecuencias que conlleva, ya que la educación puede ofrecer una protección parcial contra la adicción. En la Clínica Llave de Luz, te compartimos 10 acciones para prevenir adicciones.

Tabla de contenidos

Introducción sobre 10 acciones para prevenir las adicciones

No sólo es importante llamar la atención sobre los riesgos del consumo de drogas, sino también desarrollar estrategias preventivas. Esto debe ser parte integrante de un esfuerzo global. Por ejemplo, para reducir la probabilidad de que estos comportamientos se inicien en la adolescencia temprana, es esencial que los padres marquen la diferencia aprendiendo más sobre ellos y comunicando estos conocimientos a sus hijos.

Está demostrado que prevenir el consumo de drogas tiene menos consecuencias y mayores beneficios que hacerlo después de haberlas consumido. Esto ayuda a prevenir el consumo de drogas entre niños y adultos, así como otros comportamientos adictivos como el juego o los videojuegos.

Para padres y educadores, este manual ofrece una serie de estrategias de prevención que se basan en las mejores pruebas disponibles tanto de la literatura científica como de la experiencia. Incluye recomendaciones para informar a padres, profesores y cuidadores sobre temas relacionados con el desarrollo del adolescente, la prevención de la violencia, la prevención del consumo de sustancias, la educación para la salud sexual y el acoso entre adolescentes. Además, también contiene información sobre cómo trabajar con jóvenes que han sido víctimas de comportamientos violentos o de consumo de sustancias.

En México, el consumo de drogas afecta significativamente la salud pública. Los estudios epidemiológicos más recientes destacan principalmente tres tendencias: una disminución de la edad de inicio, un aumento del consumo entre los adolescentes, especialmente entre las niñas, y una disminución de la percepción del riesgo asociado al consumo de sustancias.

Vulnerabilidad de los jóvenes ante las adicciones

Nuestros jóvenes y poblaciones más vulnerables, incluidos los indígenas, LGBTTTIQ, afromexicanos, migrantes y/o con alguna discapacidad, necesitan tener acceso oportuno a información veraz para poder tomar decisiones sobre sus vidas enfocadas en su salud y cuidado tanto físicos como mentales.

Esperamos que nuestros jóvenes sean conscientes de cómo evitar los peligros y efectos negativos del uso de dichas sustancias, tales como el desarrollo de una adicción, accidentes, enfermedades y otras circunstancias que puedan perjudicar su calidad de vida, proyectos, sueños y desarrollo integral.

De igual forma, si un usuario decide continuar consumiendo dichas sustancias o le resulta difícil dejar de consumirlas, usted puede ayudar a evitar o reducir los daños y efectos adversos haciéndole saber cuáles son las opciones accesibles para obtener información y atención profesional.

Todo esto se hace promoviendo la igualdad de género, los derechos humanos y la desestigmatización y no criminalización de los consumidores, quienes merecen ser tomados en serio.

Acercarse a los servicios que brindan y ofrecen servicios relacionados con la salud y la población en general es una forma de abordar las preocupaciones sobre las adicciones o abordar los problemas de salud mental, además de que dichas instuciones están muy familiarizadas con las 10 acciones para prevenir las adicciones.

Llamar a la Línea de Vida al 800 911 2000 o visitar el micrositio sobre adicciones de la Conadic Secretaría de Salud son los primeros pasos para ambos colectivos.

La adicción como enfermedad

La adicción es una enfermedad persistente caracterizada por la búsqueda y el uso compulsivo de drogas, incluso cuando hacerlo tiene efectos negativos.

Las drogas alteran la estructura y el funcionamiento del cerebro, lo que afecta al sistema de recompensa, por lo que se considera una enfermedad que afecta al cerebro.

Ciertas tendencias de comportamiento aparentemente inofensivas pueden convertirse en adicciones y obstruir seriamente la vida diaria. Estas adicciones conductuales tienen las características centrales de los trastornos adictivos, como la dependencia y la falta de control, en la vida diaria (familiar, laboral, social).

Apuntes iniciales sobre las 10 acciones para prevenir las adicciones

La adicción es una enfermedad del alma, una tristeza que se apodera de nosotros y nos roba la vida poco a poco. Es una plaga que afecta a millones de personas en el mundo, y que, si no se atiende a tiempo, puede tener consecuencias devastadoras. Sin embargo, existen formas de prevenirla y combatirla.

La prevención es la mejor arma contra la adicción. Es importante educar a los jóvenes sobre los peligros de las drogas y el alcohol desde temprana edad. Es necesario enseñarles a tomar decisiones informadas y a desarrollar habilidades para resistir la tentación de probar sustancias nocivas. Los padres también deben estar atentos a los cambios en el comportamiento de sus hijos y buscar ayuda si sospechan que podrían estar en riesgo.

Además, es fundamental que las personas tengan acceso a tratamientos eficaces para la adicción. Muchas veces, las personas que luchan contra esta enfermedad se sienten solas y desesperadas, y no saben a dónde acudir. Es importante que sepan que hay ayuda disponible y que no están solas en su lucha.

Por último, es esencial promover un estilo de vida saludable. La adicción suele estar relacionada con problemas de salud mental, como la ansiedad y la depresión. Por eso, es importante cuidar de nuestra salud mental y física, practicando ejercicio regularmente, teniendo una dieta equilibrada y durmiendo lo suficiente.

Para prevenir las adicciones, se recomienda seguir varias estrategias:

  • Educación sobre los riesgos de las drogas y otros comportamientos adictivos.
  • Fortalecimiento de las habilidades sociales y de resolución de problemas para ayudar a las personas a manejar situaciones de estrés.
  • Promoción de un estilo de vida saludable que incluya ejercicio regular, una dieta equilibrada y suficiente sueño.
  • Fomento de un ambiente familiar y social positivo que promueva valores como el respeto y la responsabilidad.
  • Acceso a tratamientos eficaces para las adicciones existentes y apoyo continuo para ayudar a las personas a mantener la abstinencia.

10 acciones para prevenir las adicciones, sobre el consumo de alcohol, tabaco y drogas ilegales en sus hijos

Lista de 10 acciones para prevenir las adicciones

1. Apoya con con el ejemplo

Los mejores ejemplos a seguir por los niños son sus padres. Enséñeles que pueden superar obstáculos y tener éxito sin usar drogas.

Enséñales que hay otros maneras de resolver problemas además de tomar drogas. Establezca reglas de comportamiento en la casa para que sus hijos sepan cómo actuar. Hijas e hijos aprenden más de nuestras acciones que de lo que decimos.

Los personajes visitan con frecuencia bares o resuelven sus problemas bebiendo cuando tienen problemas en algunas películas y programas de televisión. Inconscientemente, confiamos en ese recurso, pero ese no debería ser el caso. Trate de encontrar una solución a sus problemas sin usar drogas o alcohol. Para hacer esto, decida cuál es el conflicto y considere todas las posibles soluciones. Date tiempo para decidir qué solución tiene más beneficios que inconvenientes e impleméntala.

2. Obtenga más información sobre los amigos de sus hijos

Para que sus hijos estén alertas y unidos para detectar cualquier problema a tiempo, anímelos a invitarlos a su casa cuando esté allí y a relacionarse con otros padres.

Permítales hospedar a sus invitados mientras usted está en casa. Tus hijos experimentarán apoyo y podrás conocer a sus amigos, conversar con ellos y aprender más sobre lo que les gusta hacer en grupo. Trate de hacer esto cuando sean jóvenes para que aún puedan hacerlo cuando sean jóvenes.

Trate de ponerse en contacto con los padres de sus amigos. Los padres pueden apoyarse unos a otros conociéndose, cuidando a los hijos de los demás y detectando los problemas desde el principio.

3. Su hijo debe ser inculcado con valores saludables

Un niño sabrá decir NO al consumo de drogas y alejarse de personas o lugares que lo pongan en peligro cuando vive con principios y valores claros que se refuerzan y aprecian.

Tu hijo o hija sabrá decir NO al consumo de drogas y evitará juntarse con personas o ir a lugares que lo pongan en peligro cuando vivan con principios y valores claros. Enséñele a su hijo, oa usted mismo, el valor de la amistad genuina. Asegúrese de que comprenda que los verdaderos amigos respetan las decisiones, los principios, los valores y las creencias de una persona y se preocupan por el bienestar de los demás. También evitan ponerla en peligro o situaciones de riesgo.

Debemos transmitir a nuestros hijos e hijas la importancia de aceptarse a sí mismos por lo que son, respetando las elecciones, pensamientos y sentimientos de los demás. Para construir una relación más sólida con su hija, manténgase alejado de la agresión, los gritos y las críticas. A diferencia de los padres violentos o agresivos, los jóvenes tienden a gravitar hacia aquellos que los apoyan y los comprenden. También se sienten más comprometidos y responsables en presencia de padres amorosos.

Si su hija lo ofende o es indiferente o grosera, no se «involucre» en una discusión o demanda. En su lugar, demuestre su amor por su hija dándole un abrazo o diciéndole «Te amo». Tómense un descanso y saquen el tema una vez que ambos se hayan calmado. Ella cree que al estar cerca de ti, pueden «entrenar» sus formas defensivas para lidiar con la vida exterior.

4. Anime a sus hijos a formar amistades sanas

Anime a su hijo a frecuentar comidas sanas ambientes porque tendrán un impacto positivo en los amigos que hacen allí. Será menos probable que use alcohol, tabaco o drogas ilícitas porque estarán allí para apoyarse mutuamente.

Anímelos a participar en actividades que sean buenas para ellos, como unirse a equipos deportivos, organizaciones culturales o ser voluntario; allí harán amigos que, al participar en actividades positivas, los harán menos propensos a consumir drogas. Infórmese sobre sus amistades y cómo les va.

Tenga en cuenta que estos tienen una poderosa influencia durante la adolescencia y pueden presionar a una persona para que se comporte de cierta manera. Hable con sus hijos sobre los efectos negativos del uso de drogas, como daños a su salud, un mayor riesgo de accidentes o peleas, y la pérdida de amigos, familia, escuela y empleo, si sus amigos consumen alcohol, fuman o si usted sospecha que usan drogas. Fomenta la práctica de actividades deportivas y culturales desde edades tempranas.

Anímela a evitar hacer negocios con esas empresas, pero recuerde que presionarla para que lo haga puede resultar contraproducente. Hágale saber que usted está allí para él en cualquier momento y que siempre hay una manera de resolver un problema. Anime a sus hijos a vivir juntos y formar amistades si hay otros jóvenes activos y saludables cerca. Sin embargo, trate de no estar demasiado interesado, ya que podrían rechazar esos negocios por la simple razón de que los está respaldando.

5. Tenga en cuenta los consejos de su hijo

La comunicación es crucial; si prestas atención a tu hijo, él te contará sus experiencias, sentimientos, desafíos y éxitos. Si presta mucha atención, muestra interés y se abstiene de emitir juicios, será más sencillo.

Evite ser el único en hablar en una conversación con ellos; en cambio, escuche lo que tienen que decir para que pueda aprender sobre sus experiencias, sentimientos, desafíos y éxitos. Sin excluirte, aprende a escuchar. Familiarizarse con sus conflictos e intereses. Hable con ellos, escúchelos atentamente y si no está de acuerdo con algo que digan o piense que es negativo, no los juzgue ni les ofrezca sugerencias de inmediato. luego busque una oportunidad que valga la pena.

Cualquier tema que le interese debe mencionarse en un momento conveniente para la discusión. Cuando salen o llegan a la escuela, comen o se toman un descanso, puedes beneficiarte de su presencia. Recuerda que es probable que no tengas ganas de hablar cuando estés aburrido o cansado. Anímelo a pasar tiempo en silencio «relajado» con usted.

No los interrumpas si ya se han atrevido a hablar. Cuando hable, míralo a los ojos, presta atención a lo que tiene que decir, espera a que termine y luego, sin juzgarlo ni reprenderlo, ofrécele tu opinión. Apague la televisión y la radio, deje de hacer lo que esté haciendo y preste atención.

Observa lo que hace con interés. Pregúntale sobre su día, sus sentimientos, pensamientos y lo que quiere hacer o decir. Comparta sus propios pensamientos, sentimientos y deseos con él. Se familiarizarán más y se comprenderán mutuamente a través de este proceso. Evite sermonear y reprender. Piensa bien tu respuesta antes de lanzarte a un insulto o un comentario burlón que pueda herir o poner fin a la conversación si algo que dice tu hija no te parece bien. Trate de contener su ego; respire hondo unas cuantas veces y luego pregunte qué sucedió.

Aquí vamos a la mitad en la lista de las 10 acciones para prevenir las adicciones.

6. Mejora la autoestima de tu hijo

Cuando felicita y corrige a su hijo, demuestra su amor y afecto.

La importancia de los límites no se puede exagerar. Reconocer y honrar sus logros y esfuerzos.

Fortalece la autoestima de tus hijas (os) Construir la autoestima de tus hijas (os) no significa que tengas que estar de acuerdo o aprobar todo lo que hacen; solo significa que debes mostrarles que te importan al darles elogios y críticas constructivas. Muestre a sus hijos su amor y apoyo, incluso si no siempre está de acuerdo con lo que piensan.

Ella se sentirá más segura de lo que hace si su hija (o) sabe que usted cree en ella o él. Si felicita a alguien por algo que hizo, asegúrese de explicar su motivación para hacerlo. Por ejemplo, podrías decir «¡Felicitaciones, limpiaste tu habitación!». o «¡Me alegro mucho de que estés estudiando para aprobar esta materia!». Evite convertir su elogio en una reprimenda diciendo: «Te felicito, limpiaste tu cuarto PERO me dejaste un desastre en la cocina». Si necesitas felicitarla por limpiar su cuarto y al mismo tiempo señalar sus defectos, es preferible decirlo al revés.

Si crees que tu hija(o) puede mejorar algo que hace, dale opciones para hacerlo, como “esto que hiciste te puede quedar mejor, vuelve a intentarlo” o “prueba con otro color, iluminas muy bien”. No lo compares ni afirmes que «no sabes» o «no funciona».

Enséñeles a competir entre sí y enfatice sus fortalezas para que puedan mejorar en sus áreas difíciles. Cuando corrija a alguien, asegúrese de explicar su razonamiento a la persona en cuestión. Puede identificar posibles soluciones y mejorar su comprensión si es consciente de las causas fundamentales de los errores. Por ejemplo, «No creo que duermas tan tarde porque no puedes levantarte al día siguiente, estás exhausto y llegas tarde a la escuela».

7. Hable con sus hijos sobre las drogas

Eduque a sus hijos sobre el daño que el uso de drogas puede causar en su situación legal, financiera y de salud. Reconocer que tener éxito socialmente no requiere abusar o usar sustancias como el alcohol o el tabaco.

Infórmese sobre los efectos de las drogas legales e ilícitas para que pueda discutir con ellos el daño que causan. Mostrarle cómo la bebida tiene efectos negativos inmediatos, como accidentes automovilísticos, peleas, caídas o disputas con familiares o amigos, lo ayudará a comprender los peligros del consumo excesivo.

También agrega que tienen un impacto negativo en el bienestar emocional de las personas, el abandono escolar, el empleo y problemas graves de salud a largo plazo. Pregúntale sobre sus aspiraciones en la vida y lo que espera lograr en los próximos años, como sus planes de convertirse en profesional, persona, madre o padre, entre otras cosas.

8. Enséñele a su hijo a decir no

Inculque más seguridad y confianza en sí mismo en sus hijos para que puedan aprender a rechazar la presión de sus compañeros para usar drogas. Establezca pautas claras para el uso y abuso de drogas ilegales, alcohol y tabaco en su familia.

A sus hijos se les debe enseñar cómo rechazar ofertas que entran en conflicto con sus verdaderos deseos si se toma el tiempo para prepararlos para esto. Enséñeles a no sentirse culpables por rechazar a sus «amigos». Una de las principales causas por las que los adolescentes comienzan a consumir drogas, beber o fumar es la presión de los compañeros.

Sin embargo, quien tiene las agallas de rechazar a alguien con educación y respeto, es más valiente. Deben saber que si realmente son tus amigos, no podrán obligarte a beber y respetarán tu decisión.

Deben entender que estas no son amistades sanas y que pueden contar con su ayuda si insisten o amenazan con hacerlo. Dígales que al negarse a hacer algo que no quieren hacer o que va en contra de lo que creen o quieren, obtendrán más seguridad en sí mismos, se volverán más independientes y estarán más motivados para tomar las mejores decisiones posibles.

9. Fomentar la participación en actividades saludables

Anime a su hijo a participar en actividades divertidas, atractivas y saludables como los deportes, las artes, la cultura y otras actividades divertidas, interesantes y atractivas.

Tu hija(o) está protegida y prevenida del consumo de drogas si se gestiona adecuadamente el tiempo libre. No olvide que su hija lo admira como un modelo a seguir.

Si te ve participando en comportamientos saludables como hacer ejercicio, comer bien, tocar un instrumento, leer o pintar, se dará cuenta de esos rasgos tuyos y probablemente comenzará a participar en algunos de ellos ella misma.

Pregúnteles a sus hijos y a sus amigos qué quieren hacer y anímelos a participar en esas cosas y actividades. Llévalos al deporte practicando con ellos usando una simple pelota o un par de tenis. Ambos pueden ir a museos u otros lugares que les interesen.

10. Qué hacer si cree que sus hijos están usando drogas

Reconozca las señales de advertencia del uso de drogas, como cambiar de amigos, actuar de manera rebelde y pasar mucho tiempo fuera de casa.

  • Actúe con calma, hable con su hijo y exprésele sus preocupaciones sobre su posible consumo de drogas. Si admite que usa drogas, apóyelo en lugar de criticarlo. Para obtener más información y consejos sobre cómo manejar este tema, acérquese al Centro Nueva Vida o al DIF de su barrio.
  • Los padres deben prestar mucha atención a las acciones y actitudes de sus hijos, conocerlos y reconocer cualquier cambio. Como resultado, será posible identificar a los consumidores potenciales de drogas tan pronto como presenten comportamientos de riesgo. Por si notas que tu hija:
  • Con frecuencia cambia de amigos, así que no deberías conocerlos.
  • Con frecuencia miente y se mete en discusiones sobre cuestiones triviales.
  • sin indicar de dónde obtuvo el dinero, pide prestado o regala dinero.
  • Ella descuida su tarea y baja sus calificaciones.
  • Sale con más frecuencia, pero no revela adónde va.
  • ignorar su arreglo personal. Ella es una persona de mal genio.
  • Tiene olor a alcohol, solventes o cigarrillos.
  • En casa, los objetos de valor están desapareciendo.

Estos son algunos indicios de que su hija puede estar abusando del alcohol o las drogas. Si crees que esto está ocurriendo:

  • Mantiene la compostura y les habla (a los o) sin enfadarse ni sollozar.
  • Infórmele que cree que es consumidora de drogas.

Incluso si no hay sospechas, busca la información que necesitas para evitar que la droga llegue a tus hijos.

Video sobre 10 acciones para prevenir las adicciones

Conclusiones sobre 10 acciones para prevenir las adicciones

Todos queremos ayudar a nuestros hijos a ser responsables y a desarrollar su propia personalidad. Necesitamos establecer límites y normas que les ayuden a tomar decisiones y a vivir con las consecuencias. Nuestros hijos no deben esperar que siempre les rescatemos de los problemas. También tienen que aprender a enfrentarse a la resolución de conflictos y a tomar decisiones.

Lo más importante que podemos hacer como padres es ser coherentes y justos en nuestros límites, teniendo en cuenta que ser niño no es fácil.

En resumen, la adicción es una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo, pero existen formas de prevenirla y combatirla. Es importante educar a los jóvenes sobre los peligros de las drogas y el alcohol, proporcionar tratamientos eficaces a las personas que luchan contra esta enfermedad y promover un estilo de vida saludable. No estamos solos en esta lucha. Esperamos que las 10 acciones para prevenir las adicciones que te hemos compartido ayuden a que tengas más información con tus seres queridos sobre este tema.

Como padres debemos asumir este papel sin remordimientos, es por eso con en la Clínica Llave de Luz, además de compartirte 10 acciones para prevenir las adicciones, estamos para apoyarte cuando tu familia o seres queridos necesiten de atención especializada. Si necesitas apoyo no dudes en comunicarte con nosotros por nuestra forma de contacto o nuestros teléfonos 722 121 1366 y 722 828 2976.

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